TAMAÑO DE LA LETRA 
Maximizar Fuente Minimizar Fuente

Evitemos sustos innecesarios
Por Redacción, 19-07-2015 07:09:00
© diario del bebe

El Diario del Bebé.

Los niños desconocen aún la noción del peligro. Para ellos, el mundo es un gran universo por descubrir, aunque esté plagado de amenazas. Ante éstas, unas simples medidas de precaución nos ahorrarán más de un desagradable sobresalto.

Sin saberlo, los niños están especialmente expuestos al peligro, y además, de forma constante. Accidentes en carretera, caídas, quemaduras, envenenamientos o ahogamientos son las causas más frecuentes de lesiones en la infancia. Sin embargo, al margen de la edad y del entorno, la mayoría de los infortunios sí se pueden evitar.

Un bebé, por ejemplo, aunque todavía no tenga capacidad para andar, sí que mueve sus manitas y tiende a llevarse todo a la boca. Para impedir que se atragante, no debemos dejar objetos pequeños tales como monedas, pendientes o palillos a su alcance. Sus juguetes han de estar legalmente homologados y no han de tener piezas que pueda ser arrancadas en su afán de ‘saborear’.

Para prevenir el riesgo de ahogamiento, no le dejaremos jugar con bolsas de plástico y le quitaremos los lazos y las cadenas de alrededor del cuello cuando vaya a dormir.

Con el fin de que no se caiga de la cuna, a la hora de elegirla nos aseguraremos que los barrotes sean lo suficientemente altos para que el pequeño no salte, y lo suficientemente próximos para que no pueda salirse ni meter la cabeza entre ellos. Igualmente, si ya usa cama, colocaremos unas barreras específicas y cubriremos con tela los bordes y cantos de los muebles con los que pueda tropezar.

UN MUNDO POR DESCUBRIR

Al gatear, parece que sus deditos sientan especial atracción por meterse en esos dos pequeños agujeros de la toma eléctrica que, curiosamente, suelen estar a su altura. No nos olvidemos de cubrirlos con los protectores necesarios.

Cuando ya camina, tendremos que asegurarnos de que los suelos estén limpios y secos para que no resbale, así como de que las alfombras estén adheridas y bien estiradas para prevenir los tropiezos.

En su camino hacia el descubrimiento, querrá ver qué se esconde dentro de un cajón (quizá medicamentos que a sus ojos le parezcan llamativos caramelos de colores), o qué hay detrás de una puerta, ventana o incluso de un balcón. Existen en el mercado numerosos bloqueadores de cajones, puertas y ventanas que aseguran el cierre. Además, cerca de ventanas y balcones tendremos que retirar cualquier elemento que le pudiera servir para subirse encima.

EL ALMA DEL HOGAR

La cocina es, si no la que más, una de las zonas más especiales de la casa. Aquí manejamos numerosos ingredientes con los que agradar nuestros paladares y satisfacer nuestras necesidades alimenticias. Empleamos desde afilados cuchillos, largas espátulas, humeantes sartenes con aceite hirviendo, ollas que contienen sabrosos guisos en plena ebullición, hasta detergentes y jabones para dejarlo todo impoluto. Los riesgos, como los aromas embaucadores, flotan en el aire.

Por ello no debemos dejar las sartenes y cazos con los mangos hacia fuera. Ni que decir tiene que siempre habrá que mantener fuera del alcance del niño los objetos afilados, electrónicos, de combustión (cerillas, etc.), así como todos los productos tóxicos. Y si nos preocupamos de poner en la casa un detector de humos, mejor que mejor.

Hasta aquí nos hemos centrado en el interior del hogar. Pero el riesgo no entiende de paredes. En el coche, el niño tendrá que ir en su sistema de retención infantil correctamente colocado. Además, activaremos el seguro de las puertas y haremos que suba y baje del coche siempre por la puerta de la acera.

La educación civil y urbana es esencial para que aprendan a ser responsables. Y primero hay que enseñar con nuestro propio ejemplo, ya que los niños hacen lo que ven y nosotros somos el modelo a seguir. En la calle, por ejemplo, tendrán que caminar por la acera, respetar los semáforos, aprender a cruzar exclusivamente cuando el muñequito se ponga en verde o por los pasos de cebra, y mirar siempre antes de dar un paso.

Si van patinando o montando en bici, han de hacerlo de día, con casco, con protecciones en las rodillas y con ropa visible. Deben ir por zonas adaptadas para ello, en un entorno que ofrezca seguridad.

EN MENOS DE TRES MINUTOS

Aunque ya hemos dicho adiós a las vacaciones de verano, no está de más repasar algunos aspectos relacionados con la piscina, la playa, los pantanos o los ríos.

No olvidemos que en menos de tres minutos se puede ahogar una persona y que los ahogamientos son precisamente una de las principales causas de mortalidad infantil. Solo en las piscinas europeas, como apunta un informe del Ministerio de Sanidad, se produce una media de 236.000 lesiones al año, algo que se podría evitar simplemente siguiendo unas pautas de precaución.

Aunque mantengamos una vigilancia permanente, debemos enseñar a los niños a nadar (los más pequeños o los que no saben nadar han de utilizar flotador o manguitos). En general no se tienen que tirar de cabeza en las zonas poco profundas ni correr por los bordillos de la piscina. Han de respetar las horas de digestión, entrar al agua despacio para atenuar los choques de temperatura y no permanecer tiempos prolongados al sol, para así impedir una insolación. En la playa es importante explicarles los significados de las banderas.

Si seguimos estas sencillas medidas, nos ahorraremos grandes sustos como hospitalizaciones o visitas indeseadas a los servicios de urgencias. Los accidentes son irremediables, pues no podemos evitar que los niños se caigan o se den un golpe. Pero lo que sí pueden y deben hacer los padres y los educadores es enseñarles a que desarrollen su autonomía siendo más responsables. La educación es, por tanto, la clave fundamental para la prevención.


*Si te ha resultado interesante este artículo, te animamos a seguirnos en Facebook y Twitter

El diario del bebé

ENVÍE SU COMENTARIO
El Diario del Bebé
Facebook Twitter
El Diario del Bebé
Los contenidos de esta web únicamente tienen carácter informativo; en ningún caso pretenden sustituir la opinión de un profesional de la salud.
Ante cualquier duda consulte siempre con su médico o pediatra.
Otros periódicos del Grupo Ediciones Digitales Siglo 21
Secciones
Contacto

Aviso Legal
© CopyRight El Diario del Bebé